María Elena Walsh nació en Ramos Mejía, provincia de Buenos Aires, el ° de febrero de 1930.
Creció en un ambiente con muchas libertades, lejos del estereotipo de "la réplica de Shirley Temple, a quien las niñas debíamos imitar en risitas con hoyuelos y sacudidas de adorables rizos tirabuzones".
La conocí a través de sus cuentos infantiles, como Dailan Kifki, La Sirena y el capitán, o de sus canciones infantiles y no tanto. Gracias a ella y sus composiciones, conocí un mundo lleno de dulzura, ingenio y fantasía.
De adulto, me fue dado conocer otra faceta de su obra, más adulta, más femenina o más contestataria.
Su primer trabajo fue un libro de poemas, Otoño imperdonable publicado en 1947. Pese a su juventud, en este escrito la autora nos presenta una poesía madura técnica y emocionalmente, y a la vez a una mujer dueña de una gran sensibilidad romántica.
En 1948 Juan Ramón Giménez, quien visitaba la Argentina, maravillado con su libro invitó a María Elena a viajar a Estados Unidos.
De este libro comparto con ustedes el siguiente poema:
Entonces
Cuando yo no te amaba todavía
-oh verdad del amor, quien lo creyera-
para mi sed no había
ninguna preferencia verdadera.
Ya no recuerdo el tiempo de la espera
con esa niebla en la memoria mía:
¿El mundo cómo era
cuando yo no te amaba todavía?
Total belleza que el amor inventa
ahora que es tan pura
su navidad, para que yo la sienta.
Y sé que no era cierta la dulzura,
que nunca amanecía
cuando yo no te amaba todavía.
María Elena Walsh
Otoño imperdonable
La poesía es increiblemente buena. Debo decirlo, esta página es muy buena. Y lo mejor? Es que recién la empezaste, porque sino ya me hubiera convertido en un adicto visitando el archivo para ver sobre qué habías escrito.
Con respecto a Maria E. Walsh; bueno, el otro día les estaba cantando a mi sobrinas El twist del Mono Liso, versión Christian (que sería mas o menos como me la acuerdo), y me quede encantado porque les gusto y se mataban de la risa. Un atisbo de esperanza para la juventud que no escucharan a Panam, Caramelito y demases. Una abrazo.
Escrito por Christian a las 26 de Abril 2004 a las 02:41 PMVine porq vi tu commnent en lo de Maga. Me gusta tu blog, me parece muy interesante.
Muero por verlo a Chris cantando: El twist del Mono Liso!
Donde compro las invitaciones??
Escrito por Tina a las 26 de Abril 2004 a las 05:11 PMChristian, gracias por tu visita. Son muy halagadores tus comentarios. Yo ya me recorrí tu sitio. No puedo imaginarme esas clases con Maga.
Coincido con tu apreciación. Es decir, a mí nunca me pareció que nene fuese un sinónimo de minitonto.
Un abrazo.
Bienvenida Tina. Gracias por tus halagos.
Pensándolo bien, yo tb me muero por escuchar ese tema. Christian, ponete las manos, grabalo y ponelo en el kazaa así lo bajamos.
¿Te imaginás? :-DDD
Escrito por Asterion a las 26 de Abril 2004 a las 06:04 PMCasualmente en estos días releí Dailan Kifki y me sorprendí riéndome solo. Supera el absurdo de Groucho y la locura de Eduardo Mendoza.
"Estamos fritos".
Bienvenido Timón!.
Dailan Kifki, qué lindo libro!.
María Elena es incomparable. Su humor, sutileza e imaginación la convierten en única.
Lo bueno es que, aunque los años han pasado, la sigamos recordando y compartamos sus cosas con nuestros sobrinos, vecinitos, etc. Y que estos se prendan.
Por fin!
Mirá a la hora que logro entrar . . .
Muy bien, buena elección ;)
Niña bonita, al fin.
Me alegra que te haya gustado.
:-*
adore Dailan Kifky... lo ame en serio
Y creci cantando con Julia Zenco los temas de Maria Elena Walsh.
Despues, cuando tuve mi epoca de idealista intransigente, me entere de un par de cosas que me hicieron perderle el respeto. Al pedo.
Un momento memorable de mi infancia fue cuando conoci a Manuelita, la tortuga que tiene una estatua en Pehuajo
Maga, todos tuvimos nuestros momentos de intransigencia. Después la experiencia te enseña que hay matices y momentos.
¡Qué linda voz tiene la Zenko!